viernes, 9 de agosto de 2019

TERESA LAMB


La hermana María Paz traía ropa y yo la repartía. El chalecito de ellos estaba lleno de cosas: calzado, ropa... ahí nos reuníamos.
Ella era española, no era de la capilla, vivía con otras monjas en una casa quinta atrás del aserradero" (Calle Mármol).
Venían a la capilla, juntaban a los chicos, a las familias. Ella iba a las casas a invitarlos y les habla.
Repartían facturas, pan, lo que necesitaban les daban. Era la hermana María Paz, la hermana Rita... no me acuerdo el nombre de las demás, eran cuatro o cinco.



Hacían cursos de cerámica, enseñaban a tejer, a coser a chicas y señoras.
Yo estaba metida en todos lados, iba para ayudarles. Seleccionaba y doblaba ropa junto a otras mujeres. Era más o menos como un centro cultural, no hacían ahí reuniones religiosas, para eso estaba la capilla

Nosotros vinimos al barrio en el año 50, todavía no estaba la estación. 
Mi papá trabajó en el fondo, haciendo calles.

Conocimos al primer vecino Sarmiento, el hijo también falleció, queda la nuera.

Scotucci era ingeniero y junto a otros vecinos hicieron el proyecto de la iglesia, él no vivía acá. Venía  con la señora, que los ayudaba, los fines de semana. Vivían en la capital.

Nosotros participábamos en las fiestas que se hacían en la Sociedad de Fomento, ayudábamos preparando todo y con la limpieza.
La escuela tampoco estaba cuando vinimos a vivir acá.


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